Fotos

de viajes, travesias y salidas de cicloturismo

Fecha: 15-01-2013 #518336

1900 km por lagunas y sierras bonaerenses en 12 días!!!

Estimados colegas del pedal y de la aventura:Gracias a Dios, una vez más (la tercera), con mucha alegría puedo relatarles el viaje más largo de mi vida cicloturista finalizado este domingo 13/01 ¡Fueron 1901 km inolvidables! Sali de Glew el miércoles 02/01, bien tempranito (05:30), con destinos varios, todos los cuales armarían un circuito que pasaría (como puntos extremos) por Carhué y Sierra de la Ventana, pasando por Olavarría y Tandil. Ante todo, aclaro dos cosas: 1) subí la mayor cantidad de fotos que Picasa me permitió (hasta mil por álbum, por eso lo partí en dos álbumes) para que puedan ver en detalle las? 1200 fotos que me zarpé en sacar (la pobre camarita quedó con la lengua p?afuera jaja), y 2) no se rían de mi atuendo ?del Sahara? che! Al sol no tenes con qué darle, así que traté de ocultarme en cuanta manga de tela pude hacer (mi esposa me carga diciéndome que en lugar de un ovni soy un ?OCNI?: objeto ciclístico no identificado jaja qué cruel jaja). Continúo mi relato. En 12 días, a un promedio de prácticamente 160 km diarios (con mucho viento en contra en lo que vendría, salvo el primer día), pude recorrer lo siguiente:El primer día, luego de tomar mi habitual sendero rural desde San Vicente pasando por Loma Verde, Villanueva y Gral. Belgrano (para no tomar la siempre evitable ruta 29 ?no me gusta esta ruta, es muy peligrosa, siempre lo digo-), pasé por Chas y llegué casi en el crepúsculo (luego de recorrer una dura huella con mucha pero mucha pisada de vaca) hasta la estación Ibañez. Allí acampé en un rincón del campo de un generoso vecino (Tino y familia) que me concedió su permiso (queda justo al lado de la escuelita). Hasta aquí recorrí mis primeros 171 km (como p?a entrá en calor, vió?).El segundo día, tuve que agarrar inevitablemente la 29 desde Ibañez hasta Casalins. Y menos mal que no seguí mi itinerario por el campo porque no pude ubicar el camino planificado que salía de la 29 antes de llegar a Real Audiencia para costear la ruta por adentro. Digo menos mal porque resulta que cuando diviso a lo lejos desde el puente del canal 9 (sobre la ruta), el puente de este camino rural lo había derrumbado el agua con el gran caudal que lleva por estos días? así que me ahorré unos cuantos km por terrible sorpresita. Más tarde iba a compensar tal ahorro con un camino que no pude continuar rumbo a Rauch. Pasó que tracé mi rumbo por camino paralelo al canal 9 (por una parte) y al llegar, luego de quitar un alambre boyero, en el siguiente obstáculo me topé con una tranquera de alambre que estaba tan pero tan tensa que no pude desarticularla como para pasar, por lo que me fui puteando a dos manos y retrocedí hasta la ruta nuevamente para llegar a Casalins. Allí tomé camino vecinal trasversal por 75 duros km a pleno rayo de sol hasta Rauch. Si bien fue duro el momento del día para hacerlo (desde las 12 hasta las 17) se compensó con un camino relativamente bueno (compacto y en descenso, salvo tramos). Repuse fuerzas en Rauch en la pizzería Pipo frente a la plaza (venden unas empanadas gigantes a 3,50 y es el único lugar abierto a la tarde). Aliviado del calor, le metí pata para Egaña (no llegué a ver el castillo de Díaz Vélez porque estaba cerrada la tranquera y el monte de gigantescos eucaliptus lo tapan muy bien) y De la Canal, recorriendo 200 km y llegando a las 21. Algo curioso: desde el campo, al atardecer, ya se podían divisar las siluetas grisáceas de las sierras de Tandil y también desde el cielo logré ver lo que para mi fue una estrella fugaz (o basura cósmica humana meteorítica quizá). Duró diez minutos y era una estela rosada flúo muy luminosa (ver foto) cual avión a chorro pero más cortita y ancha. Muy raro? El lugar de acampe esta vez fue la sala de primeros auxilios de De la Canal. Muy gentilmente el enfermero Luis, a cargo del lugar, me proporcionó colchón y todo (hasta cené unos ravioles de verdura alucinantes con agua tónica fresca ?gentileza de la casa- y dormí en la sala de espera del consultorio, un lujo).El tercer día recorrí Tandil y tuve mi primera experiencia negativa? como un mocasín (pelot?) adolescente me cebé con la zigzagueante ?bajadita? del cerro centinela y al intentar bajarla con los casi 10 kg de carga que llevaba, entre el envión que levanté y las piedras del camino me empezaron a hacer saltar la cadena y para colmo, le metí pata con la pedaleada para lograr sencillamente como un gilastrun (boludooooooo, ay ay ay)? que la cadena se salga de la corona más grande y se meta entre los rayos y las coronas. Esto hizo que el cambio se extendiera mal mal hacia adelante y la cadena actuó de sierra, serruchándome 5 rayos con prolijidad quirúrgica. Me putié millones de veces y me agarré la cabeza hasta que gente muy gaucha del lugar (varias personas) aprovechando que estaba de reparto el aguatero, subimos la bici (sin la carga, obvio) a la camioneta de los bidones y fuimos ?de urgencia? al ?hospital? más cercano (alguna bicicletería ?debería? estar abierta un sábado al mediodía).La cosa se complicó porque tuve que peregrinar por cinco bicicleterías. Pasaba que al día siguiente era Reyes y tenían mucho laburo como p?a darle urgencia a mi asunto. Gracias a Dios, di con el gran Domingo Fortino (único bicicletero honesto y el más idóneo de todo Tandil). Se adelantó media hora a la apertura de su bicicletería (en lugar de las 15 llegó 14:30) para darle prisa a la solución de mi problema. Un grosso con todas las letras don Fortino. Se convirtió en una entrada en boxes prácticamente, así que volví muy contento al cerro, cargué de nuevo los bártulos y seguí mi camino. Luego de meter escasos (pero agradecidos) 111 km hice noche en Gardey. Acampé detrás de una histórica casona abandonada frente a la estación.El cuarto día, bajo amenaza constante de lluvia, me mandé nomás por caminos de tierra (que en realidad son más duros que? ripio en su máxima dureza). Atravesé Vela (pasando antes por un bellísimo camping ?ver fotos-), Tedin Uriburu, Chillar, 16 de Julio y entré en Olavarría. Allí pasé la noche en las comodísimas instalaciones del cuartel central de bomberos de dicha ciudad. Mi agradecimiento eterno al jefe del cuartel, el mayor Raúl Ferreira. Este día hice 145 km, atravesando bellísimas sierras al llegar a Olavarría. Se veían las cementeras y caleras gigantescas cercanas a Sierras Bayas.El quinto día fue el más duro de todos. Girando y girando por Olavarría hasta dar con el ?camino de los chilenos? o ?la rastrillada? (recorrido que históricamente hicieron los indios araucanos que venían desde Chile para robar ganado y demás por nuestras pampas) rumbo a Guaminí, encontré la 60, nuevamente de un ripio durísimo? y un calor infernal, con viento muy fuerte atravesado (para variar).Era tan largo este trazado que atiné a llegar hasta Huanguelen al menos, pero incluso esto también era lejos. Para colmo, siendo domingo no andaba ni un alma en este camino como para preguntar cuánto faltaba para Huanguelen. A la hora del crepúsculo, me desmoralicé cuando al cruzar una chata de un puestero, me respondió cual ?puñal?? que faltaban 40 km para Huanguelen? ay ay ay? así que atiné a acampar frente a una estancia nomás. Dios me dio fuerzas para seguir de noche, porque no salía nadie de esa casa de la estancia así que me dije: te lo tomas con soda, preparas linterna y vas tranqui metiendo de a 10 km. En cuatro etapas lo tenes cocinado.Todo salió de diez. Alcancé Huanguelen a las 22. Y me pasó algo curioso. A mitad de trayecto, estaba tan pero tan cansado y tensionado por andar de noche que las luces de Huanguelen (que parecían que me seguían) para mi en realidad eran camiones que estaban cosechando junto con las cosechadoras y todas sus luces, encolumnados en medio del campo jaja! Qué mal que estaría que pensé que iban a la par mía. Ni se me cruzó por la cabeza que esas luces? era el pueblo! Me hubiese puesto contento mucho antes. Allí pasé la noche? en el calabozo de una comisaría? pero por las buenas? jaja che no hice nada malo!! Era el único lugar (y muy cómodo) que tenían en la comisaría para recibirme. Dormí muy bien luego de los 208 km metidos!!El sexto día pasé por Guamini, donde increíblemente conocí al gran Pharma de BTT (Guille), un amigazo resultó ser con la ayuda brindada (y guía turístico, para ganar tiempo lo seguía por los lugares más característicos de la ciudad). Preparándose para el Pinto (que espero le vaya muy bien) me lo crucé en la ruta de acceso a Guamini. Compartimos gracias a su amabilidad fruta fresca y Terma en su casa (ver foto de las dos potencias ciclísticas). Hasta me hizo compañía para llegar a Arroyo Venado? un grosso Guille, con todas las letras!! A él le debo la foto sacada desde abajo, cual rasante sobre el camino. Qué fotógrafo che!!! Jaja Luego llegué a Villa Epecuén y Carhué, donde tiré la bolsa de dormir en el corner de la cancha de papi fútbol del Racing Club? de Carhué! Amabilísimo Ruben, el encargado del club. Otro capo total! Este día metí 126 km.El séptimo día encaré p?a Pigué. Pasé por Espartillar y bordeando las vías pasé por Ducos, para llegar a Pigué. Allí agarré el camino que se mete entre el Cura Malan grande y el chico, muy duro por tramos (tener en cuenta la carga que llevaba). El ripio era gigantesco. Había sombra por momentos y algunos vados. Rodié las sierras y me metí en lo que maravillosamente llaman Abra del Hinojo. Un lugar increíblemente hermoso. Una paz vivís cuando lo recorres. Se escuchan los pájaros y el mugido de las vacas por el efecto acústico de las sierras. Es un pasaje entre las sierras. Es un mundo aparte pasar por ahí. Te desconecta del otro mundo, el real. Si bien se presenta accidentado, hay muchos árboles y vados. Da para acampar en alguno de sus rincones, ni hablar.Menos mal que la noche me agarró saliendo del Abra, en las cercanías de Dufaur, donde tiré bolsa de dormir en el baño del balneario municipal, gentileza de la gente de la comisaría y los cuidadores del balneario, quienes prontamente me ubicaron en ese lugar para que pudiera descansar. Llegué a Dufaur a las 22 y metí este día 160 km (los km del Abra valen por dos por lo duro que es pasar por ahí.. y más con carga).El octavo día Sali para Tornquist, orillando las vías. De allí agarré el camino que pasa por el hogar Funke y el Abra de los Vascos, para llegar a Estomba (a escasos 80 km de Bahía Blanca). Una estación abandonada que no tiene nada, nada, nada. Estaba tan cansado ese día que pensaba reponerme allí (qué iluso) pero ni agua pude cargar, mucho menos comer algo. Menos mal que llevaba 7 caramañolas? hay pesos que te salvan la vida. Si me hubiese repuesto, hubiese ido una escapadita hasta el Dique Paso de las Piedras que se podía ver desde allí, a unos pocos km? y bue, todo no se puede che. Una pena. Retomé rumbo a la civilización y salí a Saldungaray. Allí me clavé unos sándwiches gigantes de jamón y queso completísimos ?fatto in casa? en la puerta de un super!! Ahhh qué placeeeer!!Aquí pasé noche en el jardín de la estación del ferrocarril, gentileza de los empleados del Roca. Armé carpa en un costadito. Este día metí 101 km.El noveno día Sali tempranito para Sierra de la Ventana, a escasos 9 km. Muy pintoresco lugar, pero no hay como la experiencia de sentir las sierras en el Abra del Hinojo. Aquí se ven a la distancia. En el Abra les pasas al lado. Pasé por el puente blanco del río Sauce Grande y fui descubriendo las distintas estaciones del ramal Pringles que pasa por Ventana rumbo a Bahía.Pasé las abandonadísimas Peralta, Stegmann, Reserva, Krabbé, Paraguil y Hermanas hasta entrar a Laprida. Allí descansé en las cómodas instalaciones del destacamento de bomberos de esta ciudad, gracias a la autorización del oficial Arizmendi y compañía. Esta noche me clavé cuatro platos de spaghetti que me hice en la cocina del cuartel con un tuquito casero que me salió de diez (un paquete entero de Matarazzo)!! Animaaaaal!!! Jaja Este día recorrí 148 km.Al día siguiente, con mucho viento atravesado, encaré para Olavarría, pasando por las estaciones fantasmas de Voluntad y Santa Elena. No llegué a pasar por Durañona porque el estado del camino no me lo permitió (por dichos de baqueanos, estaba todo inundado). Tuve que hacer un rodeo larguísimo para salir al bolichón La Suerte sobre la 51 (asfaltada, por suerte). Desde allí, salvo por el viento, todo se hizo mucho más llevadero (sin tanto sobresalto por ripio ni encajando en el talco de la tierra en polvo). Pasé por Santa Luisa y Villa Fortabat, para ingresar a Olavarría. Volví a descansar en el cuartel de bomberos y, de yapa, ligué un asado con gaseosa y todo!! Amabilísimos los bomberos de Olavarría. Me llevo un recuerdo muy grato de todos y cada uno de ellos!! Me ayudaron muchísimo!! Este día metí 137 km.El décimo día fue muuuuuy largo. Pasé por la 226 por Colonia Hinojo y por caminos rurales corté camino por Nieves, para adentrarme al Azul. Pude recorrer poco de esta ciudad pero muy pintoresca, por cierto. Una pena. Quería regresar lo antes posible. Ya el viaje se tornaba un tanto largo (y me restaban pocos días de vacaciones para ?aclimatarme? antes de empezar a laburar a mitad de semana). Sali para la ruta 3, aprovechando la banquina (hecha percha que tiene pero banquina al fin) y tras recorrer de noche los km que separan Cacharí de Las Flores, pude llegar a las 23:45 a Las Flores, luego de meter? 214 km!!! Luego de cenar, buscando dónde descansar a la 1 de la matina unos vecinos me recomendaron ir al camping municipal. Un golazo es este camping!! Un lujo!! Allí tiré bolsa de dormir a la intemperie debajo de una glorieta de enredaderas. Muy lindo!! Dormí poco porque quería llegar sin falta el domingo 13/01. Así que me levanté 06 AM. El carguero pasaba a 50 metros en la madrugada y temblaba el piso. Por lo menos descansé algo. Bostecé todo el trayecto hasta San Miguel del Monte, donde repuse fuerzas almorzando tranqui y ?sesteando? bajo un árbol. Desde aquí conocía un camino que va trasversalmente desde Monte hasta San Vicente, evitándome la L de pasar por Cañuelas. Tomé este camino y el sufrimiento del asiento se hizo tortuoso con el traqueteo de la tosca pero llegue al fin a San Vicente a eso de las 21 para alcanzar mi punto de partida, Glew, a las 22, tras recorrer 181 km desde Las Flores.Más allá del episodio del centinela que se cobró 5 rayos, el resto de los contratiempos fueron generados por un enemigo implacable oculto entre los yuyos: las rosetas. Estos pequeños y filosos abrojos fueron un dolor de cabeza durante todo el viaje. Si bien atendía la urgencia con el líquido anti pinchaduras Revigal cuando veía que se ponían pesadas las ruedas, hubo un momento, al regreso, saliendo del Azul, que tuve que cambiar las dos cámaras porque era tanta la cantidad de esas pequeñas espinitas acumuladas previamente que no daba abasto el líquido. Por lo demás, fue un viaje alucinante, pero duro para sentarse en la bici. Hay muchos detalles que se me escapan en este relato. Cualquier consulta, al que le interese que me avise que con gusto le responderé.Saludos y abrazos de corazón a toda la comunidad betetera a lo largo y ancho del país.Buen año 2013 y que se cumplan todos sus deseos y desafíos y puedan rodar y rodar!!!
Roberto
PD:
Les paso el link para que vean el mapa del recorrido:

https://maps.google.com.ar/maps/ms?msa=0&msid=206142724349106244703.0004d2e5619eb73167787&ie=UTF8&ll=-36.765292,-59.27124&spn=5.060185,9.876709&t=h&z=7&vpsrc=6&ei=cdP1UMOBKMTetgf72YCIAw&pw=2

Acá van los dos links de los álbumes de fotos de Picasa:

https://picasaweb.google.com/Arielbritos1/GlewTandilOlavarriaCarhueSierraDeLaVentanaOlavarriaGlew1de2

https://picasaweb.google.com/Arielbritos1/GlewTandilOlavarriaCarhueSierraDeLaVentanaOlavarriaGlew2de2

Opiniones de 1900 km por lagunas y sierras bonaerenses en 12 días!!!

~~1358296795~~

Kali

15-01-2013 21:39

Que barbaro!!!! Que manera de pedalear!!!! FELICITACIONES!!!!!
Voy a tratar de entrar a picassa para ver las fotos!
ABRAZO

~~1358297172~~

1900 km por lagunas y sierras bonaerenses en 12 días!!!

Opiniones de 1900 km por lagunas y sierras bonaerenses en 12 días!!!

Mensaje privado